MISTERIOS de GOZO

                                   
                                    

REZAR MEDITANDO
MISTERIOS DEL ROSARIO
(Extraídos de la obra
“De las tinieblas a la Luz”)

Este librito nace del deseo de unir la plegaria con la meditación de los mensajes que la Santísima Trinidad ha concedido al instrumento que ha escrito la obra “De las tinieblas a la Luz”.
                  Será útil particularmente en momentos de oración personal, en Encuentros de grupos, Retiros espirituales, fiestas de Acción de gracias.
                  Meditar los misterios del Santo Rosario, así como las invocaciones de la “Coronilla del Amor”, entrando en el corazón de algunos mensajes, nos ayudarán a comprender mejor el proyecto que el Señor manifiesta en esta Obra, así como el sentido mismo de la oración.
                  Unir plegaria i lectura nos ayudará a concentrarnos en el conocimiento más perfecto de la voluntad de Dios. Además de sumergirnos en la contemplación de las maravillosas imágenes que el cielo nos regala.
                  El mismo Jesús nos pide que recemos el Santo Rosario y la “Coronilla del Amor” en adoración ante el Santísimo expuesto.



Misterios de Gozo

Primer misterio de Gozo:
Anuncio del Ángel a María Santísima.

MEDITACIÓN
7 Diciembre 1999

            “Frente a mí veo una especie de ‘capullo del gusano de seda’ pero de vidrio soplado, como he visto hacer a los antiguos vidrieros de Venecia, y que tiene los dos extremos cerrados como un caramelo.
            Aunque me sea difícil explicarlo, tengo dentro de mí la certeza de que su interior no ha tenido ni tiene ningún contacto con el aire exterior. Además  el calor al cual el vidrio ha sido sometido al soplarlo, ha credo un vacío absolutamente esterilizado.
                  No entiendo lo que significa y en el momento de preguntármelo, veo, con delicioso estupor, que, en el interior de esta delicada envoltura, hay una recién nacida, bellísima: ¡María!
                  Y, a la vez, descubro al maestro vidriero: ¡El Padre Celestial!
                  Intuyo entonces la labor de las Manos Creadoras de Padre que, unida al soplo de su Boca, en un solo acto puede crear a María Niña y su perfecta protección
                  Inmediatamente percibo, más allá de mis sentidos, la Concepción Inmaculada de la Virgen María,no sólo como verdad de Fe, sino ¡como experiencia viva!
                  Ahora sé, por revelación del mismo Dios, que la Inmaculada Virgen María ha sido creada en un acto sublime, único e irrepetible, de la Creación Celeste.
                  He comprendido, clara y profundamente el significado inequívoco de la afirmación de la Iglesia: “María sin pecado concebida”.
                  ¡A Ella no la pudo alcanzar el pecado!
                  La Voz del Creador, siempre solícita, me da esta extraordinaria explicación:

                                   “María ni conocía ni conoció pecado.
                                   Pero María, como cualquier creatura, fue libre.
                  Sólo en el caso que, en su libertad humana, hubiera decidido romper aquel transparente velo, concebido con Ella misma, diciéndome “no”, diciendo “no” a mi Proyecto divino sobre Ella, tan sólo entonces, María hubiera podido, como otra creatura cualquiera quedar expuesta al pecado.
                  ¡Pero su “sí” fue total!
                  ¡Ella, mi Creatura ha mantenido, en su vida terrenal, aquel velo de fino cristal, intacto para la eternidad…!  ¡Con su “Fiat”

OREMOS
                  Bendita Niña María, tú que creciste en aquel capullo vivo y en  absoluta mancha de pecado… ¡eres misterioso pensamiento del Padre!
                  Nada ni nadie podía rozarte o ajarte. ¡Tú eres el Jardín cerrado, accesible sólo a tu Creador e Hijo, por obra del Espíritu Santo, tu Esposo! Inmaculada Concepción.  Amén.
Segundo misterio de Gozo:
Visitación de María a su prima Santa Isabel.

MEDITACIÓN
24  Noviembre 2000

Interiormente veo una ciudad típicamente árabe, bulliciosa. 
La multitud vociferante y alegre. Los niños corretean felices. Los mercaderes ofrecen las más diversas mercaderías.
Predominan los colores naturales, de tierra o arena, propios de estos lugares, especialmente en las vestiduras de las personas. Esto confiere alambiente un calor particular, sin contar con la temperatura que percibo es muy elevada en una ciudad tan soleada. 
Después, en medio de la multitud, y en contraste con todo lo que le rodea, veo una joven con un vestido blanquísimo, un modelo muy diferente al de los demás. 
Más que una túnica recta y suelta hasta los pies, como visten las otras mujeres, veo que lleva la cintura ceñida: la joven es María.
Es evidente que está en avanzado estado de gestación. 
Veo claramente que en la cintura lleva una faja de color azul, como en Lourdes:   “¡Es la Inmaculada Concepción!” 
En mi corazón, extasiada, pienso en su santidad, que la hace digna de llevar en Sí misma al Hijo de Dios hecho Hombre, para, después de ser concebido, hacernos este don a toda la humanidad. 
María habla a mi corazón:

“¡Sí, la santidad me hizo capaz de concebir la Vida
en el corazón antes que en mi cuerpo!
Yo llevé a Jesús al mundo,
antes incluso que fuera visible en mi cuerpo virginal.
Y los limpios de corazón lo percibieron!

¡Yo soy la nueva Eva! 
¡La que retornará a la mujer su dignidad inicial! 

¡Está llegando a término  la era de los descendientes de Eva!
¡Está a punto de comenzar la era de los descendientes de María!
¡Yo soy la Inmaculada Concepción!
OREMOS
                  Oh María, con tu santidad, haznos dignos  de llevar a Jesús Niño a nuestros hermanos que aún no Le conocen.  


Tercer misterio de Gozo:
Nacimiento de Jesús en el Postal de Belén

MEDITACIÓN
                                                     Se acerca la Navidad  1997
                  
                  …  no consigo imaginar  a Jesús Niño!
                  Ante mis ojos se suceden imágenes del Calvario.
                  Las tres cruces negras se recortan en un cielo gris obscuro.
                  Una voz, dentro de mí, repite, dulce y tristemente:

                                   “Todo se ha cumplido”

                  Jesús sostiene el mundo entre sus manos: en este momento un mundo pequeño, y está llorando. ¡Llora sobre la humanidad que, ni siquiera en Navidad, conoce y siente su ternura! 
                  María toma el Niño del pesebre, lo envuelve y lo pone en mis brazos.
                  Me acerco a su cara para besarlo y me doy cuenta que en su frente, tiene un moratón negro azulado en el que hay como un agujero.  Descubriendo su cuerpo veo los mismos moratones en su pecho, en sus manos y en sus pies.  Le digo a Jesús:

                  “¿Quieres ocupar mi corazón? Pequeño mío, te prepararé un cojín de amor y te cubriré de ternura para calentarte.”

                  Y lo abrazo dentro de mí…

OREMOS
                  ¡Oh María, Madre de Jesús y Madre nuestra, ayúdanos a amar al Pequeño Jesús, como sólo Tú sabes amarlo!


Cuarto misterio de Gozo:
Presentación del Niño Jesús en el Templo
y la Purificación de María.

MEDITACIÓN
                  27 Febrero 2000

                  María me habla al corazón:

“La plena obediencia a la Ley abre las puertas del Cielo. 
¡Era Virgen, pero obedecí!  ¡Permanecí Virgen porque Jesús es Dios!
¡Sin embargo, aún siendo Dios, su pequeño Cuerpo era verdadera Carne! Con todo, no necesita ninguna intervención humana para hacer comprender su verdadera Divinidad, ni para ser concebido ni para nacer.
He seguido permaneciendo Virgen y no he tenido, físicamente, otros hijos, porque todo mi Ser, físico y espiritual, ha sido creado por el Padre para que perteneciera única y exclusivamente a la Stma. Trinidad.
Que no se llamen a engaño los inteligentes, que no se pierdan en discusiones vanas... en hipótesis condescendientes. 
La verdad es una sola y es ésta:  Mi Virginidad, como te mostró el Espíritu Santo (imagen del 7 de diciembre de 1999) es real desde la Eternidad y para la Eternidad por purísimo Pensamiento del Padre Creador. 
¡Vuestra fe, hijos míos, para que seáis hijos de Dios, es muy simple!
Las elucubraciones no conducen a comprender los misterios. Desead ser mis hijos, no investigadores de mi misteriosa Maternidad.   ¡“Yo soy” la Virgen María! 
¡”Yo soy” la Esposa perenne del Espíritu Santo! ¡Amén!

OREMOS
                  Oh María, Señora del SÍ, siempre obediente a la Voluntad de Dios y a su Ley, ayúdanos a obedecer humildemente, en toda circunstancia, a nuestra Santa Madre la Iglesia, como has sabido hacerlo Tú.  Amén.
Quinto misterio de Gozo:
Encuentro de María y José con Jesús en el Templo

MEDITACIÓN
14 Mayo 2002

                  De un tiempo a esta parte tengo presente ante mis ojos interiores y en mi corazón al adolescente Jesús de 12 años, vestido con su túnica blanca, con un ceñidor.
                  Sus pies desnudos todavía no presentan señal alguna de las heridas pero su aspecto, unido a la ternura, me imponen una gran reverencia.  Su autoridad de Dios me inunda con su fuerza de Amor.
                  Más adelante, durante la Consagración, el Muchacho Jesús me susurra esta declaración:

                                   “¡Me hice Eucaristía,
                                   porque éste era el Proyecto de mi Padre!”

                  Su juvenil mirada es distante y llena de responsabilidad.  Entonces comprendo que debió ser de la misma manera aquel día en el Templo de Jerusalén, cuando dijo a sus padres:

“¿No sabíais que debía ocuparme de las cosas de mi Padre?”

OREMOS
                  Oh María, ayúdanos a amar los Proyectos del Padre, como supisteis hacerlo Tú y José,  y a amar a Jesús aunque no comprendamos su manera de obrar. Amén.

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